Con la llegada de la Navidad, muchas familias prestan especial atención a la ambientación del hogar. Luces, guirnaldas y adornos típicos ocupan un lugar importante, pero algunos elementos clásicos también encierran significados que van más allá de lo estético. Uno de ellos es la campana con una cinta roja colocada en la puerta de entrada, una costumbre que, desde la mirada del Feng Shui, cumple una función energética y protectora.
Qué dice el Feng Shui sobre la campana con cinta roja en la puerta
Esta filosofía milenaria de origen chino sostiene que los espacios están atravesados por el Chi, la energía vital que circula y se renueva de manera constante. Para el Feng Shui, las campanas no son simples adornos: su sonido actúa como un activador que ayuda a mover la energía estancada y a disipar vibraciones densas. Incluso un tintineo suave, producido al abrir o cerrar la puerta, alcanza para mantener ese flujo en movimiento.
El color rojo de la cinta tampoco es casual. En el Feng Shui, este tono está asociado a la vitalidad, la protección y la buena fortuna. También simboliza celebración y expansión, valores estrechamente ligados al espíritu de la Navidad. Al unir la campana con una cinta roja, se refuerza la intención de cuidado del hogar y se crea una especie de filtro simbólico que busca impedir el ingreso de energías negativas.
La ubicación es otro punto clave. La puerta principal es considerada uno de los sectores más importantes de la casa, ya que funciona como el punto de ingreso del Chi. Colocar allí la campana permite que el movimiento natural de las personas active ese flujo energético, favoreciendo un clima de armonía y bienestar, especialmente en una época en la que aumentan las reuniones y las emociones compartidas.
Para que el objeto cumpla su función, se recomienda elegir una campana de sonido claro y suave, evitando materiales que produzcan ruidos estridentes. La cinta roja debe estar visible y en buen estado. Además, renovar el adorno cada año simboliza el cierre de un ciclo y la apertura de uno nuevo, una idea muy presente en los rituales de fin de año.
