El hallazgo fue compartido en redes sociales por @HarryAlexOk, se volvió viral y desató una ola de reacciones entre usuarios que bromeaban sobre rituales satánicos y otros que intentaban tranquilizar al joven.
El protagonista de la historia, que se encontraba solo en el edificio, relató su experiencia a través de una conversación de WhatsApp con un amigo. “La situación es turbia, realmente. No hay nadie en el edificio, el ascensor está raro y mirá”, escribió el joven junto a dos fotos que mostraban la cabeza del animal junto a los cables.
La publicación se viralizó rápidamente en X (anteriormente Twitter), generando miles de comentarios. Algunos usuarios, con humor negro, especulaban sobre la presencia de un espíritu maligno o un ritual satánico.
Otros, en cambio, trataron de calmar al joven asegurando que la cabeza de ciervo no necesariamente indicaba la presencia de un peligro real. Un usuario, autoproclamado “experto en macumbas”, incluso analizó las fotos y concluyó que “el cráneo de animal no fue utilizado para ningún rito”.
Más allá del susto inicial y las bromas en redes sociales, el incidente abrió un debate sobre el significado psicológico de exhibir cabezas de animales como decoración. Según expertos, este tipo de trofeos pueden simbolizar poder, control y dominación, reflejando una personalidad competitiva o dominante.