Con motivo celebrar el invierno y como una de las actividades de la “Fiesta Nacional de la Noche Más Larga” llevada a cabo estos días en Ushuaia, decenas de nadadores se sumergieron este lunes a la noche en las aguas heladas del Canal Beagle.
La experiencia se concretó en “Playa Larga”, un sector costero de la capital fueguina ubicado a pocos kilómetros del centro donde participó un grupo conformado por deportistas de Ushuaia, Río Grande, Río Gallegos (Santa Cruz), distintas ciudades de Buenos Aires, Córdoba y Punta Arenas (Chile).
La temperatura del agua rozaba los 2°C y la sensación térmica en el exterior era de 7°C bajo cero. A pesar de eso, los nadadores se desprendieron de su ropa de abrigo y vistiendo únicamente trajes de baño comenzaron a pisar el suelo cubierto de nieve y después las piedras del fondo del canal hasta sumergirse completamente en el agua helada.
Fue hace pocos años que la inmersión en el Canal Beagle se incluyó en la programación de la Fiesta de la Noche Más Larga, la clásica celebración de los fueguinos para darle la bienvenida al invierno cada 21 de junio.
Canal de Beagle: una experiencia de 15 minutos en agua helada
La hazaña comenzó a las 23.55 y se extendió hasta las 0.10, en que las personas retornaron a la costa luego de nadar en grupos hasta una embarcación que servía de guía, y en medio de un operativo de seguridad montado por miembros de la Prefectura Naval Argentina y bomberos voluntarios.
“La idea era repetir la tradición de años anteriores y sumarnos a la Fiesta de la Noche Más Larga recibiendo el invierno con nuestra actividad”, explicó César Barrientos, uno de los referentes de Nadadores de Aguas Frías (NAF) de Tierra del Fuego, la entidad organizadora del evento.
Luego de salir del Beagle, los nadadores recibieron una medalla, y pudieron secarse y abrigarse en una carpa especialmente montada en el lugar.
Alfredo Bisignani, padre de la natación en aguas frías
Durante el evento también se otorgó una distinción especial a Alfredo Bisignani, considerado “uno de los padres” de la natación en aguas frías en la región, junto con Walter Ruano.
“Es un deporte muy agradable de disfrutar, teniendo en cuenta cuidados y con el entrenamiento adecuado. También tuerce un poco la idea de vivir de espaldas al agua, como sucede en tantas ciudades costeras e incluso en Ushuaia. El baño en agua fría tiene infinidad de beneficios”, analizó Bisignani.
El experimentado nadador recordó que la actividad comenzó como un divertimento cuando los fines de semana acampaban en invierno en Laguna Bombilla, situada a unos 80 kilómetros de Ushuaia: “Nos metíamos al agua incluso después de romper un poco de hielo”, contó.
La actividad se fue institucionalizando a partir de aquellos precursores formaron la NAF, cuyo máximo referente es Ruano, un guardavidas y profesor de química de la ciudad.
