El desplazamiento hacia el "policial" de Botineras dejó un amplio margen de juego para los guionistas. Y así como los barras iolan chicas en un simil Esperanto y los romances cambian al ritmo de una investigación detectivesca, también se hizo lugar para el sadomasoquismo. La plataforma que permitió instalar este ítem controversial fue la relación algo enfermiza que mantienen Giselle (Florencia Peña) y Nino (Gonzalo Valenzuela), la ex Reina Madre de las botineras devenida en buchona querible y el matón asistente de Tato Marín (Damián De Santo).
Giselle hace tiempo que está enganchada con Nino, sentimiento que está por encima de su deber, que es seguirlo de cerca. Y Nino encuentra el Giselle a una amante a mano, de libre disponibilidad horaria y con derecho a "chirleao" cada tanto. Pero una cosa y la otra funcionaron como el hambre y las ganas de comer, al menos para los libretistas. En la edición del lunes, Giselle y Nino se pasaron de rosca, finalmente: tuvieron sexo con cuchillos y gruesos cintos. Con el filo del primero, Nino intentó cortarle el sostén a Giselle, pero luego le pidió que lo tajeara a la altura del omóplato izquierdo. Con el segundo, Giselle realizó un simulacro de ahorcamiento de su amante, quien al día de la sesión de sexo duro le planteó convivencia.
La escena resultó de alto impacto y consagra a Peña comoa una especialista en la delgada línea que separa el sexo sugerido del explícito. Vale recordar la escena que protagonizó con De santo en Disputas, una ficción que, años atrás, ganó el aire de América con dirección de Adrián Israel Caetano. Aunque inquietante, esta aproximación al sadomaso por parte de Botineras fue algo estereotipada y quedó lejos del retrato sobre la cultura del amo juega al esclavo (y viceversa) que la directora Anahí Beneri supo retratar en Un año sin amor.
Como sea, el uso de juguetes raros por parte de Nino deja sentada las bases para la inminente muerte de Giselle, algo que se corresponde con el deseo de Florencia Peña de abandonar Botineras.¿Se llevará algunas marcas de recuerdo?
Botineras: pintó el sadomaso...
En "Botineras", los personajes de Florencia Peña y Gonzalo Valenzuela tienen sexo violento. Hay cuchillos y cintos. Mirá las escenas.
9 de marzo de 2010,
