Este lunes, Peteco Carabajal se presentó en la tercera luna de la 64ª edición del Festival Nacional de Folklore de Cosquín 2024 junto a sus hijos Martina y Homero y la banda Riendas Libres. La gente lo recibió con mucho cariño y lo ovacionó de pie al cierre de su presentación. La fiesta se encendió con Carabajal y esta vez no hubo polémica que lo apagara.
El cantante regresó a Córdoba luego del tenso episodio que se generó en el octavo día del Festival de Jesús María 2024 cuando la vicepresidenta Victoria Villarruel llegó al predio e interrumpió su show para saludar a la gente. Mientras la banda seguía tocando, Peteco se dirigió a los presentes y les solicitó que se sentaran “porque no había llegado nadie”, en clara alusión a la vicepresidenta.
Sus dichos generaron todo tipo de repercusiones, incluido Los Carabajal y la misma Villarruel quien tomó la situación con humor y le restó importancia. Antes de subirse al escenario de Cosquín, Peteco fue nuevamente consultado por lo sucedido y este, en diálogo con radio Mitre, aseguró: “En ese momento no lo pensé. Hoy en día, que ya pasó todo, que recibí por igual adhesiones y ofensas, puedo decir que estoy tranquilo” .
Pasadas las 23.30, Peteco y Riendas Libres subieron al escenario de la plaza Próspero Molina (después del show de Silvia Lallana, Orellana Luca y la delegación de Tucumán) y fue muy bien recibido por el público, como si lo sucedido en Jesús María hubiera quedado en el pasado y lo más importante fuera la música que los unía sobre las sierras cordobesas.
Aunque se lo notó un poco nervioso al comienzo, sólo hicieron falta unos pocos minutos para que se adueñara del escenario y habilitara una fiesta sin precedentes.
Junto a su historia, sus errores y aciertos, pero sobre todo con un gran amor por su legado familiar y cultural, los artistas santiagueños embellecieron la fresca noche cordobesa, mientras la gente los acompañaba con respeto, atención y cálidos aplausos.
Cuando el cantante le pidió al público que se uniera a coro, muchos lo hicieron orgullosos y sintiendo las canciones en el pecho. “¡Bravo Peteco!”, le gritaron un par de mujeres que estaban cerca del escenario. Los músicos y sus bailarines se mostraron energéticos y felices con un Carabajal ya más relajado y entregado a su labor con amor y dedicación.
El show de los intérpretes siguió sin interludios y no hubo referencia alguna sobre lo ocurrido el pasado 12 de enero. O quizás sí, porque cuando cantaba Perfume de carnaval, Peteco remarcó el inicio de la estrofa que rezaba: “No quise decirle nada...”, acompañando con una sonrisa “pícara”.
El tema Como pájaros en el aire se llevó el primer máximo coro de la velada. Una gran parte del público se unió a los músicos en la última estrofa y protagonizaron un emotivo momento que se prolongó al resto de las canciones, cada vez más energético.
La gente no dejó de cantar y con la chacarera se encendieron casi todos, al punto tal de tener que abandonar el asiento para moverse al compás de la música. Otros simplemente miraron el show sentados y con respeto.
Pasadas las 12 de la noche, Peteco se acercó a la gente por el gran pasillo y tocó un solo de violín tan potente, furioso y emocionante que la gente enloqueció.
La plaza se encendió por primera vez en toda la noche y el músico se tiró unos pasos con una enorme sonrisa en su rostro. La fiesta fue tremenda y los aplausos de pie coronaron un show de gran altura.
Más tarde, en conferencia de prensa, Peteco fue nuevamente consultado por sus dichos en Jesús María, pero este siguió firme en sus palabras, aquellas que había dicho por la mañana y en repetidas ocaciones a la prensa cordobesa.
“Ya ha pasado. El lunes a la tarde ya pasó y el martes estaba feliz en mi casa con mis amigos y mis amores que son mis hijos. Y pensando en la gran apuesta que íbamos a hacer esta noche en Cosquín”, señaló el cantautor.
De igual manera, tanto él como su hijo, resaltaron su “miedo” frente a las posibles resoluciones que quiere poner en marcha el nuevo gobierno y que van en contra de su trabajo como artistas. Además, los dos manifestaron una fuerte preocupación por la cancelación de festivales y la desfinanciación de la cultura argentina que propone Javier Mieli con la Ley Ómnibus y el DNU.
“Los que no conocen nuestro trabajo, malentienden muy fácilmente y creen que se termina solo para los artistas. Los que trabajan cuando hay festivales son sonidistas, choferes, representantes, bailarines, vendedores de comida, etc. Es mucha la gente que trabaja en el terreno de la cultura, sin necesidad de ser artistas. Es importante que lo digamos y que la gente se informe”, señaló Homero Carabajal.
Cosquín Folklore 2024: lo mejor de las noches coscoínas
La Voz estuvo presente en la edición número 64 del Festival Nacional de Folklore de Cosquín para mostrarte el todo lo que hay detrás de este fabuloso evento. Los tradicionales carteles, la música, el baile, los platos que más salieron y todos los detalles de una noche mágica coscoína.
