Los Hecatombe! no paran de evolucionar y ahora se unieron a la plataforma nacional Flixxo para un nuevo proyecto que tanto es expresión de su esencia humorística como un desafío en cuanto a ciertos criterios de producción y formato. Pero, en resumen, es una “alta experiencia” para el grupo cordobés, hoy productora con base de operaciones en Buenos Aires.
En concreto, presentan esta vez Esto no es un telo para una plataforma que representa una alternativa a YouTube para creadores de contenido digital y al mundo del streaming para público millennial – centennial.
“El dueño de un albergue transitorio intenta convertir el lugar en un hotel de categoría teniendo que lidiar no solo con los clientes más extravagantes sino también con sus desastrosos empleados”, dice la sinopsis de la serie, catalogada como microficción.
Gino Gori, Agustín Parra, Lucas Lezin (de Hecatombe!) y Sergio Sosa (de Flixxo) dialogaron con VOS para contar más sobre este nuevo proyecto que ya se puede disfrutar en la plataforma.
El universo de los telos
“Transcurre en un albergue transitorio en medio de la nada en el que el dueño se cruza con un montón de situaciones y personajes del mundo de los telos, un universo aparte que siempre nos pareció divertido y no habíamos explorado nunca”, dice Lezin.
“En cada capítulo hay diferentes conflictos y en cada uno hay un personaje nuevo, interpretado por actores como Carlos Portaluppi, Georgina Barbarossa, Martín Rechimuzzi, Fernanda Metilli, Laila Alí y Agustina ‘Papry’ Suásquita. Fue un lujo contar con ellos”, añade Gori.
- ¿Cómo fue el trabajo con Georgina Barbarossa, un emblema de la televisión tradicional?
-(Agustín Parra) Teníamos ganas de trabajar con gente que venga de otros palos: del teatro, del cine, de la televisión, del mundo de la actuación más que de las redes. Ya habíamos trabajado con Georgina y nos dimos cuenta ahí de lo compatibles que éramos en el humor, área que ella tiene clarísima. Ella está en el primer capítulo, rompe el hielo y se animó a todo realmente, tiene escenas jugadas. Es una genia, sacó la onda al toque.
Sobre la decisión de trabajar junto a Flixxo, explican que hacía mucho estaban en contacto por personas en común con gente de la plataforma y que tenían buenos comentarios de otros colegas creadores. Ahí decidieron que era el momento para esta idea que tenían en mente hace mucho tiempo y que también es obra de teatro (“La serie es un universo ampliado”) que se presenta en el Teatro Border (Godoy Cruz 1838, de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires).
“No estábamos acostumbrados porque nuestra forma de trabajar siempre fue hacer nuestro propio contenido para nuestras redes o canal. Hacíamos el guión y tomábamos todas las decisiones”, puntualiza Lezin a la hora hacer un balance sobre cómo fue producir para una plataforma.
“Así que este año abrirnos a escuchar otras propuestas fue todo un cambio y un cambio para bien. Nos hizo salir de nuestros lugares comunes y contactar con nuevas ideas”, redondeó.
“En cuanto al equipo, en eso fuimos muy conservadores: trajimos a todo nuestro equipo tradicional de rodaje de Córdoba. Fueron los dos pilares: nuestra casa y una apuesta a hacer en Flixxo”, completa.
“Pero desde lo artístico fueron muy abiertos, nos sentimos muy libres. Pero sí, fue pensar en dónde se iba a mostrar y a qué público. Fue como hacer un trabajo con consignas en vez de uno libre. Pero funcionó muy bien”, concluye.
En ese ida y vuelta, uno de los aspectos que tuvieron que flexibilizar fue el del concepto de microserie, que al final “no fue tan micro”.
“Quedaron cinco capítulos muy divertidos que iban a ser de 10 minutos y terminaron siendo de 15 o 18. Nos gusta poder desarrollar bien las tramas y la verdad es que pusimos toda la carne en el asador”, asegura Parra.
Flixxo, una plataforma con otra propuesta
Flixxo se define como “una plataforma de video enfocada en microseries”. “Gracias a su propia criptomoneda, el Flixx, la plataforma desarrolló un ecosistema en el que se eliminan los intermediarios, dándole un mayor beneficio a los creadores con cada visualización, y una sinergia de estos con los usuarios y anunciantes”, dice una fundamentación oficial.
¿Qué significa eso para el usuario? No hay una suscripción con una tarjeta y un pago mensual como en otras plataformas. Sergio Sosa explica: “Los usuarios entran y a diferencia de otras plataformas donde quizás tenés una publicidad de la nada, les damos la posibilidad de ver las publicidades cuando quieren y cuando las ven recibe una recompensa por ese tiempo”.
“Esa recompensa son los Flixx, una moneda con valor real de mercado que después utilizan para ver el contenido, le pagan directamente al contenido que quieran”, complementa.
Hoy, la plataforma tiene más de 200 microseries de todo el mundo y 100 mil usuarios registrados que, “al apretar play, sin poner plata de su bolsillo, generan un ingreso inmediato para el creador”.
Sosa señala que Flixxo arrancó con un perfil más tecnológico, como una start up: “La idea era que fuera una plataforma de video donde la economía circulara, ayudándonos de la transparencia, inmediatez y seguridad de una criptomoneda para que la marca se comunique con la audiencia, la audiencia con los creadores y todo pueda fluir de forma directa”.
“Gran parte del equipo viene del mundo audiovisual y quisimos empezar a tener un formato de Flixxo, que fue cuando nos enfocamos en las series cortas y en lo independiente y después empezamos a querer producir ese contenido que queríamos tener”, cuenta sobre el nacimiento de Flixxo en 2020 y su crecimiento en los últimos años, que fue desde el deseo de producir hasta tener ya una docena de realizaciones propias.
Una de ellas es Esto no es un telo.
Sobre el trabajo con el grupo cordobés, Sosa dice: “Representan mucho el perfil de gente que va bien con Flixxo: gente con una visión muy clara, una creatividad muy enfocada y que la puede plasmar en distintos formatos, desde un sketch muy cortito hasta el caso de ellos, haciendo series”.