–Ha generado polémica en el festival esto de los shows al amanecer.
–Amanece que no es poco.
–León Gieco fue el primero que los madrugó a todos, el martes.
–Inauguró el nuevo refrán: al que madruga, "sólo le pido a Dios" que lo ayude.
–No sea estúpido. Es un groso León, y no quiso salir en televisión. Está en todo su derecho de transmisión.
–Tan sólo es una pantalla.
–¿Le parece que hay algo más detrás? En Cosquín la gente está acostumbrada a ver el duende, pero también fantasmas.
–Digo que la tele es sólo una pantalla.
–Siempre la llamamos caja boba y ahora resulta que nacieron los televisores inteligentes, los Smart tv. Paradoja.
–Volvamos a Cosquín. ¿Lo vio a León?
–Claro, pero de casualidad. Me fui a dormir tipo medianoche, y cuando me levanté para desayunar empezaba a cantar.
–Las nueve lunas coscoínas se acompañan mejor con medialunas coscoínas.
–Esto del after telúrico es interesante.
–¡Pero no es nuevo! La famosísima cacharpaya era un clásico de los clásicos, la gente se quedaba hasta las seis en la Próspero Molina. Y ahora se vienen a asombrar todos.
–Asombrar, poco. Ni sombra queda cuando pega el sol sobre la plaza.
–¿Vio algo más?
–Varios artistas enojados. Gustavo Patiño dijo que lo mandaron al final de una noche porque él no paga por actuar.
–Y la pagó carísimo. Fue el último de los 24 programados esa jornada.
–Y encendió de nuevo el fuego del festival.
–Algunos están practicando el grito emblemático: Aquiiiiiiiii kiosquín.
–No se vaya por las enramadas, amigo.
Ana Prada, por la memoria
–¿Algo que lo haya sorprendido de Cosquín?
–El dúo de Teresa Parodi con la uruguaya Ana Prada.
–¿De verdad lo dice?
–¡Claro! La interpretación de Pedro Canoero fue fenomenal, actuada en vivo para el país por la Televisión Pública.
–Pero dicen que Ana Prada se equivocó la letra varias veces.
–Ahhhh, yo pensé que estaba actuando... haciendo agua como el pobre de Pedro, el canoero, al que se le fue la letra.
–No, no, la uruguaya se equivocó en el más clásico de los temas de Teresa.
–Por un momento creí que la TV Pública había puesto a Capusotto con Teresa Parodia. O sea que... la canoa de la memoria de Ana estaba agujereada nomás, y se fue a la ...
–Epa, qué dice.
–...a la costa, lejos de la costa cuando me dormía.
–Los nervios pueden traicionar a los desprevenidos. No se ensañe.
–Noooo, le enseño. Mire el video aquí (desde el minuto 19.20).
En pie de guerra
–¿Algo más que le haya impactado?
–De todo. Una asociación de expresos políticos de Córdoba. Contra Coro al Resto subieron a la medianoche de la apertura.
–Expresos de medianoche. ¿Emocionante?
–Para llorar.
–¡Qué bueno!
–No, no. Lloré en serio. Me encanta el valor simbólico de las cosas, pero de paso para el año próximo podrían afinar un poco.
–Usted es horrible, mi amigo.
–Los que estaban enojadísimos fueron Los Manseros Santiagueños.
–Nada de mansos, entonces. Desde el año próximo van a hacer Los Iracundos Santiagueños. ¿Qué dijo don Onofre Paz?
–Dijeron que no los dejaron cantar más, que "se cagan en los Manseros", y agregó: "Nos echan del escenario, los organizadores. Hay gente que viene, está una hora y media, y nosotros no nos podemos tomar una media hora".
–Onofre Paz está en guerra
El locro del infierno
–Fredy Bustos, de Teleonoche, salió en un móvil desde el mismísimo infierno festivalero.
–Epa, ¿adónde fue? ¿Por qué no conocí ese lugar?
–Estuvo en los alrededores, hablando de gastronomía, una actividad sin fines de locro.
–¿Y qué encontró?
–Dijo que "en Cosquín debe hacer cuatro grados menos que en Córdoba, pero acá al lado de 12 ollas de locro, debemos estar en 70 grados".
–¿¿70?? Auch, se quemó mal el pobre movilero. Con esa temperatura se le deben freír las neuronas al pobre Fredy.
–Locrísimo todo. Qué festival raro, pasan cosas extrañas. Federico Tolchinsky se cruzó con Fredi Martino, programador del festival, por el horario de León Gieco. Dijo que había mil personas en la plaza, mientras que Martino aseguraba que había 5.000 a esa hora.
–Partámoslo al medio. ¿Cerramos en tres?
–Tolchinsky le dijo que había consultado con colegas que "decían que con suerte había mil personas".
–Upa. ¿Y Martino?
–Le preguntó qué colegas, porque él estaba en la plaza. "No estamos obligados a darle el dato", respondió el periodista.
–¿Y en Radio Universidad qué cifra dieron? Digo, para sacar un promedio.
–Según Franco Rizzi, "nuestros compañeros decían entre 2.000 y 5.000".
–Bien variable la cosa. Después nos quejamos del Carnaval Cuartetero.
–El gobierno tiene que rendir cuentas, pero se toma su tiempo.
–Mientras las cuentas no sean puro cuento.
Jubilados violentos
–Me llegó una información crucial, Aquiles. La provincia mandó un mail asegurando que estaban disponibles las entradas gratuitas para La Renga.
–Qué groso, podemos ir a hacer pogo.
–Pero no para usted, para los mayores de 65.
–Tiene lógica... entre los mayores de 65 hay rengos, cojos, fisurados, artríticos...
–No sea estúpido, ya le va a llegar a usted.
–Me encantaría, así voy a ver a La Renga gratis.
–Igual no sea malo, también hay para Dyango, Valeria Lynch y La Barra.
–Ahí espero quedarme sordo a tiempo.
