"En sus primeras épocas, transitaban por la Doble Avenida sulkys, carros y chatitas convertidos en carrozas (adornados completamente) y otros acopladitos sobre los que tocaban músicos. Otros usaban la caja del vehículo para simplemente hacer un asadito. Sin altavoces ni palco, se disfrutaba de los sonidos que surgían del alegre cortejo. En sus costados se apostaban mesas llenas de gente que se sentaba en los bares o se divertía en las kermeses". Esta jugosa anécdota se puede leer en la cartilla realizada para los tradicionales Corsos de Unquillo, que están celebrando por estos días nada menos que 75 ediciones y se extenderán desde esta noche hasta el martes 12.
En rigor, y como viene sucediendo hace algunos años, los festejos comenzaron algunas semanas antes con la realización de los corsos barriales que, tras cinco noches en distintas plazas y espacios públicos de Unquillo, tuvieron su gran cierre el pasado domingo en el acceso sur de la ciudad. Entusiastas murgas y comparsas (Los Rompesiestas, Pizadas de Barrio, Los Nacientes de San José y la Comparsa Andina fueron algunas de las que le pusieron ritmo y color a la nochecita), bandas en vivo, el cierre con la quema del Momo gigante que se veía de todas partes y una nutrida concurrencia dieron el marco ideal para que los vecinos vivieran su fiesta propia como antesala de la celebración en el centro. Celebración en la que cada uno muestra el trabajo de meses al resto de los barrios, a los visitantes de localidades aledañas y al grueso número de cordobeses que se acerca cada año.
Aunque el contexto ha cambiado con respecto a lo descripto en el primer párrafo (fragmento extraído del libro Unquillo. Las voces del tiempo), los corsos de la Doble Avenida siguen manteniendo ese espíritu familiar y, sobre todo, su rasgo localista, que fue consolidando con los años su particular propuesta estética que lo diferencia de otros carnavales de la región.
Locales y visitantes
En cuanto a la programación, en esta oportunidad se ha priorizado a los artistas de la zona por sobre las grandes figuras, que igualmente estarán bien representadas. La apertura de esta noche estará a cargo de la Murga Caprichoso Rejunte, Los Alegres del Tango con su propuesta de ritmos rioplatenses para escuchar y bailar; y el cierre con La Bomba de Tiempo, el ensamble de percusión comandado por Santiago Vázquez que viene imponiendo su singular estilo a partir de su propio lenguaje de señas. Además, habrá un desfile inaugural con 75 artistas en escena que se repetirá todas la noches.
Mañana será el turno de la Comparsa El Gran Cacique; la banda de reggae-ska El Club de los Principiantes; La Tunga-Tunga con su novedosa fusión de murga y cuarteto; la cumbia anárquica de La Pata de la Tuerta y un show de fuegos artificiales. El domingo, en la noche más cuartetera, estará la Comparsa Bella Flor, El Bombazo, Fernando Bladys y además se realizará la elección del Rey o Reina del Carnaval.
Por su parte, el lunes tendrá lugar la ya clásica "Noche de l@s niñ@s", en la que participación grupos dedicados a los más chicos (Abriendo Rondas, La Carreta, Circo Z) y no tanto (Circo da Vinci). Esta jornada tendrá entrada libre y gratuita para todo el público al igual que la del martes, en la que estarán el Murgón sin Soga, el grupo local Tierra Suelta y el gran cierre a pura chacarera con Peteco Carabajal.
Programación
Cada noche de los Corsos de Unquillo comienza a las 22. En la Doble Avenida.
Viernes. Murga Caprichoso Rejunte, Los Alegres del Tango y La Bomba de Tiempo. Entrada $ 18 (menores de 10, gratis).
Sábado. La Pata de la Tuerta, Comparsa El Gran Cacique, El Club de los Principiantes, La Tunga-Tunga, La Pata de la Tuerta. Entrada $ 18 (menores de 10, gratis).
Domingo. Comparsa Bella Flor, El Bombazo, Fernando Bladys. Elección del Rey o Reina del Carnaval. Entrada $ 18 (menores de 10, gratis).
Lunes. Noche de los Niños con Abriendo Rondas, La Carreta, Circo Z, Circo Da Vinci. Entrada gratuita.
Martes. Murgón sin Soga, Tierra Suelta y Peteco Carabajal. Entrada gratuita.